Se me pide examinar los orígenes de la guerra en Ucrania y proponer una lectura histórica y política del conflicto. La cuestión de los orígenes de la guerra no es solamente un asunto de historia, sobre el que los historiadores habrán de pronunciarse un día: se trata de una clave de análisis útil y necesaria para la prospectiva. Cualquier reflexión relativa a la evolución de esta guerra –que empezó en 2014–, al futuro de la seguridad europea o al de las relaciones con Rusia debe tomarse en consideración.
Tenemos una idea bastante clara sobre los objetivos originales de la guerra. Sabemos que los planes operativos iniciales preveían una decapitación del poder ucraniano y la instalación de un gobierno afín al régimen ruso en Kiev. Pero aún se ignora en gran medida cuál era el estado final deseado. ¿Una Ucrania neutralizada, sometida o una anexionada a Rusia?
Numerosos analistas dan por supuesto que los objetivos de guerra fijados por el presidente ruso en su alocución del 24 de febrero de 2022 –esto es, la desmilitarización y la «desnazificación» de Ucrania– eran los objetivos reales de la intervención y que estos objetivos declarados eran definitivos, no medios para alcanzar otro fin. Yo sería más prudente. No lo sabemos y, por tanto, nos vemos obligados a formular y evaluar ciertas hipótesis:¿Pretendía simplemente la invasión forzar un cambio de régimen en Ucrania y recordar por la fuerza hasta dónde llegaba la esfera de influencia rusa?
¿Se trataba de enfrentarse a la OTAN y de imponer una revisión completa del orden internacional, así como una reconstrucción de la arquitectura de seguridad en Europa?
Además de la voluntad de controlar militarmente Ucrania y someterla políticamente a vasallaje, ¿había también un proyecto para absorberla a corto o largo plazo, ya fuera por anexión –como Crimea o los territorios conquistados– o por ampliación de la Unión estatal de Rusia y Bielorrusia?
Examinar los orígenes de la guerra es una forma entre otras de interrogarse sobre la configuración final que se buscaba. Y esta es una cuestión crucial para entender los objetivos actuales de la guerra. Para identificar las identificaciones de los actores en juego, es imperativo tomarse en serio sus discursos, comprender sus representaciones del mundo, del espacio y de la historia, además de su manera de concebir y entender las nociones de «fuerza», «seguridad» y «destino manifiesto». Conviene también explicitar las percepciones engañosas, detectar los malentendidos y denunciar las falsedades que se presentan como verdades.
Es con este ánimo y desde una perspectiva histórica que me propongo examinar, primero, las cuestiones de seguridad; segundo, las consideraciones identitarias; y tercero, las razones políticas de la guerra en Ucrania. SEGUIR LEYENDO>>