Los poetas de la
niebla no han perdido la vista
solo están más
cerca del otro mundo que del mar
por eso las luces
deshacen sus ojos
y donde los otros
poetas ven flores
los poetas de la
niebla ven manchas de sangre
o ven hombres muertos
colgando de las ramas
o pueblos con
telas de arañas,
habitados por fantasmas.
Los poetas de la
niebla están ahí
para anunciarnos
que hay un momento
en el cual toda
luz desaparecerá bajo el agua,
que algo se apaga
cada día en tu mirada
pues los cuerpos
son para ellos
las sombras de
las sombras
y el comienzo de
cada mañana
solo un simple
anuncio de la noche.
Para los poetas
de la niebla,
la niebla no es
ausencia de luz
tampoco es la
plena oscuridad.
De ahí que los
poetas de la niebla
no pueden ser los
Heraldos Negros
que nos anunció
una vez César Vallejo
¿te acuerdas?
Son pocos; pero son. Abren zanjas
oscuras
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán tal vez los potros de bárbaros Atilas;
o los Heraldos Negros que nos manda la Muerte
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán tal vez los potros de bárbaros Atilas;
o los Heraldos Negros que nos manda la Muerte
No, no son eso
son simplemente
seres divididos
entre dos mundos
entre el día y la
noche
entre la vida y
la muerte
entre el suelo y el cielo
entre la razón y
la locura
entre el amor y
la traición
Entre tú y yo
Hay que escuchar
a los poetas de la niebla cuando cantan
A través de sus
voces oscuras podemos entender
por qué en toda
su apagura (y amargura) la niebla avanza
y bajo
determinadas condiciones, si no hermosa
puede ser amante,
madre, esposa, hermana. O todo a la vez
La niebla es más lasciva
que la luz
En la niebla ella
te puede entrever:apenas. Y adivinar
por qué el amor
por naturaleza es difuso y nebuloso
Los mejores orgasmos de mi vida los tuve en días con niebla
("tenía que
decírtelo alguna vez")
La luz enceguece
y la noche es ciega
La niebla nos
cubre, la niebla nos protege
de las arteras
cuchilladas de la oscuridad
y de los malignos
fuegos que descienden del sol
Los poetas de la
niebla son sin duda
los más dignos,
los más fieros, los más leales
exponentes de la
triste condición humana
Solo cuando
mueren se va la niebla, y ellos no piden nada a cambio
Son buenos
En el corazón de
cada ser humano crece una niebla
Y bajo la niebla
vive y muere un poeta de la niebla
Y aunque si bien
la niebla no es la poesía, la poesía es la niebla
Algún día todos
los metereólogos del mundo lo reconocerán.