Fernando Mires - REQUIEM A UN DICTADOR



A los que quisieron elevarse por sobre las leyes del poder
A los que intentaron ser dioses y hacer a las naciones a su imagen y semejanza 
A los que no respetaron ni a los destinos ni a las biografías
A los que no enmudecieron frente al llanto de las novias
A los que callaron frente al dolor terrible de las madres
A los que usaron a los humanos como arcilla para construir hombres nuevos
A los que hicieron matar y torturar en nombre de su fama
A todos esos les llegará su hora: la biología es más sabia que la historia.

Serán festejados o llorados, envueltos en banderas, incinerados o embalsamados
Pero el tiempo que es el viento de la vida los irá –uno a uno- borrando de la tierra
Serán gusanos, serán bacterias, serán microbios, serán anécdotas, serán una fecha aprendida de memoria en las escuelas
Y con el correr de los siglos no quedará nada y como ellos nada fueron, nada serán.

Del sembrador florecerán las semillas y de las flores vendrán las danzas, los amores y los versos. Pero de ellos nada nuevo nacerá.

¡Ese y no otro será el castigo!