Viernes de la Poesía: Anton Julian - LA SANGRE EN LA ESPINA



El alma me vuelve al cuerpo
recuerdo otros días ardientes,
me quedan goticas de vida,
al cielo no lo han nublado todavía,
vuela un pájaro loco sobre mi mano,
y un nube más fea que un mono se acerca

Me has rajado el dedo pulgar, rosa maldita 

Esta tarde leeré un libro lleno de misterios ocultos
y esta noche escribiré sobre la maldad infinita
de las espinas, “quienes”, como si fueran mujeres,
hieren los dedos –los dedos, no el alma- de los hombres

cuando cultivan, escuchan y beben el jugo de las rosas.