(Viernes de la poesía) Anton Julian - UNA TEORÍA SOBRE EL CIELO





Mi tesis es que nuestro único límite
está en el cielo. Pero entiéndeme,
no hablo del cielo de arriba,
ni de sus gordiflones ángeles
o de sus sacros santos enyesados
Te estoy hablando, chica, de otra geometría
Te hablo del límite que se sitúa más allá
de todo los que nos rodea,
de todo ese saber pagano y divino e ignorado
Te estoy hablando, ¿me escuchas? Te estoy hablando
de un cielo situado más allá del horizonte
De un cielo donde late mi respiración
aunque no es de aire. De ese cielo, óyeme tú,
de ese cielo que no está en las profundidades
de Hölderlin ni en los abismos de Heidegger
Tampoco creo verlo en el fondo
de la materia oscura de Neruda.
Ni en el pasado que retorna de Nietzsche y Borges,
No, mil veces no: el cielo lo veo más bien rondando
como un pajarraco sin plumas alrededor de tu alma
Y hoy día: entre tu cama y tu lámpara. Pero no se ve.
Pero no se siente. Pero no se piensa. Pero creo que te amo
El cielo, es lo que quiero decirte,
es lo que somos y no somos, un hilo de agua
sin cauce que aparece por todas partes.
Por ejemplo ayer lo estuve mirando en la apertura
verde e inmaculada del melón tuna y ahora
aparece en ese rayo de sol que nadie sabe como
ha entrado por la ventana, solo para iluminar tu cara.